Una de las mayores responsabilidades de los padres es garantizar la seguridad de sus hijos cuando viajan en coche. Esto significa conocer y cumplir la ley de sillas infantiles para el coche de su zona. En España, la ley establece que los niños menores de 135 cm y 36 kg deben ir sujetos a un sistema de retención infantil adecuado, como una silla infantil, un elevador o un elevador con respaldo. Este artículo tratará sobre la ley española de sillas infantiles para el coche, los distintos tipos de sillas para el coche y algunos de los aspectos clave a tener en cuenta cuando se utiliza una silla para el coche.
Tipos de sillas para el coche
Antes de hablar de la ley, es importante conocer los distintos tipos de sillas para el coche que existen. Éstas son las sillas orientadas hacia atrás, las orientadas hacia delante, los elevadores y los elevadores con respaldo.
Los asientos orientados hacia atrás se utilizan para bebés y niños pequeños de hasta 4 años, o cuando pesan alrededor de 18 kg. Estos asientos ofrecen la mejor protección para bebés y niños pequeños, ya que reparten de forma más uniforme el impacto de un choque y reducen el riesgo de lesiones en el cuello y la médula espinal.
Los asientos orientados hacia adelante deben utilizarse para niños de entre 9 meses y 4 años, según la ley. Estos asientos ofrecen una buena protección en caso de colisión, pero es importante asegurarse de que se instalan correctamente y de que el niño va bien sujeto.
Los asientos elevadores son para niños de entre 4 y 12 años o que pesan más de 36 kg. Estos asientos garantizan que el niño utilice correctamente el cinturón de seguridad del coche, ya que elevan al niño a un nivel en el que el cinturón de seguridad de tamaño adulto puede colocarse correctamente.
Los elevadores con respaldo son para niños de entre 6 y 12 años. Estos elevadores protegen tanto la cabeza como el cuello, y también aseguran que el cinturón de seguridad del coche se coloque correctamente.
Puntos clave a tener en cuenta
Al utilizar un asiento de coche infantil, es importante tener en cuenta lo siguiente:
1. Tamaño adecuado. Tamaño adecuado: Asegúrate de que la silla o el elevador es del tamaño y el peso adecuados para tu hijo. Esto garantizará que el niño vaya seguro y cómodo.
2. Instalación: Asegúrate de que la silla o el elevador se instale correctamente. Esto significa asegurarse de que se ancla al asiento del coche correctamente, y de que no se mueva más de 3 cm en ninguna dirección.
3. Cómo asegurar al niño: Es importante asegurarse de que el niño va bien sujeto en la silla del coche o en el elevador. Esto significa asegurarse de que el arnés o el cinturón estén colocados correctamente y de que no estén ni demasiado apretados ni demasiado sueltos.
4. Airbags: Es importante asegurarse de que los airbags se desactiven cuando se utiliza una silla infantil orientada hacia atrás.
Ley Española sobre Sillas Infantiles para el Coche
La Ley Española sobre Sillas Infantiles para el Coche establece que los niños menores de 12 años deben sentarse en los asientos traseros de un coche, a menos que el asiento del pasajero delantero esté equipado con un sistema de retención infantil. Los niños menores de 12 años y menores de 135 cm deben ir sujetos a un sistema de retención infantil adecuado siempre que viajen en un coche. La ley también establece que el asiento debe estar anclado al asiento del coche, y que no debe moverse más de 3 cm en ninguna dirección. El niño debe ir sujeto con el arnés o el cinturón adecuados a su tamaño y peso, y es importante asegurarse de que se desactiven los airbags del coche cuando se utiliza un asiento infantil orientado hacia atrás.
En Conclusión
Es responsabilidad de todos los padres garantizar la seguridad de sus hijos cuando viajan en coche. Ello implica cumplir la ley española de sillas infantiles para el coche, y utilizar una silla para el coche o un elevador adecuados para su talla y peso. También es importante garantizar que el asiento de coche se instala correctamente, que el niño va bien sujeto y que se desactivan los airbags del coche cuando se utiliza un asiento de coche orientado hacia atrás. Si toman estas medidas, los padres pueden estar seguros de que su hijo está seguro cuando viaja en coche.